26 noviembre

CABO DE BUENA ESPERANZA

Después de un buen desayuno y cargando la moto, salimos hacia el Cabo de Buena Esperanza disfrutando de las impresionantes vistas de la costa con las inmensas playas de arena blanca. Recorremos Chapman Peak, uno de los caminos más bellos del mundo. El objetivo del día es llegar a Hermanus, un pequeño pueblo donde se pueden ver ballenas. A lo largo del camino que conduce al Cabo de Buena Esperanza, tenemos un encuentro cercano con avestruces, que no parecen asustadas ni se acercan, probablemente acostumbradas a la presencia del hombre. Al llegar a Hermanus a primera hora de la tarde, nos informan que la observación de ballenas ya no es posible. Decidimos comenzar entonces hacia Cabo Agulhas. A lo largo del camino nos encontramos con una cría de avestruces, en cientos. El paisaje y los paisajes cambian constantemente, desde las colinas cultivadas hasta los grandes espacios dedicados al pastoreo. Para llegar al cabo de Agulhas conducimos por un camino de tierra durante unos 30-40 km, donde no hemos cruzado a nadie, solo a grandes granjas y miles de vacas en pastoreo. Llegamos por la noche al cabo de Agulhas y vamos a tomar fotos del monumento mítico creado para señalar el cruce de dos océanos, el indio y el Atlántico. Luego nos mudamos a Stransbaai en una casa de huéspedes pequeña, muy agradable y acogedora, no antes de repostar la moto.